Miedos y fobias

El MIEDO es una experiencia común en los seres humanos, teniendo este un importante valor adaptativo para la supervivencia de la especie. El miedo es una sensación que todos experimentamos cuando identificamos una posible amenaza. Por ejemplo, cuando vemos un león delante nuestro (amenaza) sentimos esa sensación de miedo que nos prepara para identificar el peligro y protegernos de él.

Sin embargo, cuando esas sensaciones se dan en situaciones que no son amenazantes (el león si lo era, estábamos en peligro) realmente, se produce un miedo que ya no es adaptativo, o lo que es lo mismo, una FOBIA. Las fobias están definidas como un trastorno de ansiedad que se caracteriza por un miedo intenso, desproporcionado e irracional, ante objetos o situaciones concretas​ como, por ejemplo, a los insectos o a los lugares cerrados. 

Para poder entenderlo mejor, vamos a poner un ejemplo para diferenciar estos dos términos.

Por ejemplo, una persona que tiene miedo a volar, necesita coger un avión por motivos laborales. En el caso de que esta persona, solo tuviese miedo a volar, experimentaría algún síntoma de ansiedad, pero acabaría cogiendo el avión y acudiendo a su cita. Sin embargo, la persona con fobia, en primer lugar, intentaría buscar otra forma de poder realizar el viaje, y si no lo encontrase al pensar que tiene que subirse en ese avión se dispararía la ansiedad, pudiendo incluso acabar en un ataque de pánico. En segundo lugar, esta persona quizás valoraría como le afecta tener que realizar ese viaje, y ante esa valoración pudiese ser que decidiese no realizar el viaje aunque la consecuencia fuese que la despidiesen del trabajo.

¿CUÁLES SON ENTONCES, LAS CARACTERÍSTICAS DE LAS FOBIAS?

  • Son desproporcionadas a la situación que desencadena la respuesta de miedo.
  • Están relacionadas con estímulos (situaciones u objetos) que no son objetivamente peligrosos.
  • No pueden ser eliminadas racionalmente.
  • Están más allá del control voluntario.
  • No son específicas de una edad determinada.
  • Son de larga duración.
  • Interfiere considerablemente en la vida cotidiana de la persona en función de las conductas que la persona realiza para evitar dicha situación.

¿CÓMO SE CREA UNA FOBIA?

Mowrer, pionero en el estudio tratamiento de diferentes fobias, sitúa el origen de estas en la asociación de una falsa o auténtica alarma con un objeto/situación preparado para adquirir propiedades fóbicas. Pero, ¿cuándo se produce dicha fobia? La clave en el proceso para padecer una fobia, se encuentra al emparejar un estímulo neutro (el cual tiene probabilidad de considerarse fóbico) con otro estímulo (B) que posee características particulares para que tenga lugar una respuesta de miedo (C). Por ejemplo, cuando una persona presencia un accidente de tráfico (estímulo A) puede condicionar esa situación con miedo a montarse en el coche (estímulo B), dando lugar a la respuesta de miedo (C) cada vez que tenga que montarse en el coche. Las primeras veces, la persona puede tener un malestar para hacerlo, pero conforme se va consolidando la fobia, la persona buscará otra forma de ir al lugar que quiere, por ejemplo, ir andando, lo que dará lugar a la creación y mantenimiento de la fobia.

TIPOS DE FOBIAS MÁS COMUNES

  1. Fobia específica

Las fobias específicas tienen en común que aquello que genera miedo es una situación, objeto o ser concreto. Es decir, algo que puede ser identificado y separado fácilmente del resto. Dentro de las fobias específicas, podemos diferenciar 5 subtipos, los cuales son los que más predominan en la población.

  • Fobia a los animales: Por ejemplo, fobia a las arañas (aracnofobia), fobia a las serpientes (ofidiofobia), fobia a las ratas (musofobia), etc.
  • Fobia SID (Miedo a sangre-inyección y daño).
  • Fobias relacionadas con entornos naturales: Por ejemplo, miedo a las alturas (acrofobia), miedo a las tormentas (astrafobia) o miedo a la lluvia (pluviofobia).
  • Fobias de situación: Dentro de este grupo hay 3 fobias que son las más características y que son padecidas por un gran número de personas. Encontramos miedo a volar (aerofobia), miedo a espacios cerrados (claustrofobia) y miedo a conducir (amaxofobia).
  • Fobia social, la fobia social hace referencia a la interacción social, es decir a la relación de la persona con otros individuos. Es un miedo o ansiedad intensa en una o más situaciones sociales en las que la persona está expuesta al posible examen por parte de quienes le rodean. Algunos ejemplos son las interacciones sociales (por ejemplo: mantener una conversación, reunirse con personas extrañas), ser observado y actuar delante de otras personas (por ejemplo: dar una conferencia).

¿CÓMO PODEMOS AYUDARTE DESDE EL GABINETE DE PSICOLOGÍA?

La forma más rápida y eficaz de trabajar con las fobias es a través de la exposición a los estímulos temidos. La terapia de exposición se centra en cambiar el modo en que reaccionas al objeto o situación que te da miedo.

Desde nuestro gabinete de Psicología trabajamos además con una herramienta que forma parte de las Terapias de Tercera Generación, EMDR, a través de la cual se trabaja la fobia en torno a 3 momentos clave:

  1. El primer episodio en el que sitúo el origen de la fobia.
  2. El peor episodio en torno a la fobia.
  3. El último episodio.

De esta forma, ponemos el acelerador en el cerebro, y podemos trabajar de forma más eficaz y rápida las fobias , a la vez que podemos desensibilizar el miedo que nos produce enfrentarnos a ellas.